Las sociedades democráticas no solo aspiran a autogobernarse por medio de instituciones políticas liberales que garantizan la representación política de los ciudadanos, sino que además se gobiernan de acuerdo con principios establecidos en sus textos constitucionales. Entre ellos, se encuentra la justicia distributiva: la idea según la cual las democracias deben preocuparse por ayudar a los más desfavorecidos, siendo equitativas, sin por ello dejar de premiar el mérito individual de quienes se esfuerzan para realizar sus planes de vida; máxime cuando la creación de riqueza es indispensable para que pueda desplegarse el asistencialismo estatal. ¿A quién debe ayudar el Estado, cómo y bajo qué condiciones? Manuel Arias Maldonado charlará con Jahel Queralt, especialista en la materia, sobre la justicia en la democracia y sus distintas derivaciones: de la meritocracia a la inmigración, pasando por la mendicidad y la justicia (o injusticia) entre generaciones.