La modernización de nuestro poder público, imprescindible para la reforma de la sociedad española, recuerda al mito de Sísifo que evocase Albert Camus: tan pronto como no parece que depositar la roca en la cima de la montaña, hemos de bajar a recogerla de nuevo. Todos los intentos por transformar nuestras instituciones públicas, la administración y su sector público, incluido ese poder judicial asediado periódicamente por las fuerzas políticas, han resultado inconcluyentes. Ese fracaso es hoy más doloroso, ya que la crisis financiera trajo consigo un impulso regeneracionista que hoy parece abandonado: la corrupción partidista y el clientelismo público han vuelto a acaparar titulares. Hablaremos con Rafael Jiménez Asensio sobre las razones que explican el atraso relativo de España en este terreno, entre ellas la falta de una genuina tradición liberal, desgranando los problemas y esbozando sus posibles soluciones.