En la primavera de 1877, Málaga se engalana para recibir la visita de Alfonso XII. La ciudad preparó entonces su mejor cara: exposiciones, banquetes, paseos. Y la música, una de las más queridas aficiones de los anfitriones reales, resonó en sus calles, teatros y salones. Eduardo Ocón se convirtió en maestro de ceremonias de la mano de familias tan conocidas como los Scholtz o Grund. ¿Qué se escuchó aquellos días en el flamante Teatro Cervantes, en la Sociedad Filarmónica y más allá de sus muros? En esta charla recorremos dónde están hoy las huellas de esa Málaga musical.
La banda sonora del XIX: ¿qué música se escuchaba entonces? Con María Ruiz Hilillo
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