Una obra visual, estrenada en enero pasado en el prestigioso centro Pompidou en París, con la que la cineasta recoge, proyecta e interpreta imágenes de la rebelión contra el velo obligatorio y el régimen islámico en Irán, grabadas por sus propias protagonistas.
¿De qué ruinas emergemos? Las imágenes luchan por salir, pero salen igual, solas, recogidas por manitas. Fechas, horas y pistas para devolver a la fuerza vital de nuestra resistencia un nuevo calendario que se perfila ante nosotros. Ese “nosotros” que está aquí, que mira de lejos, que sigue, que archiva y que espera a cada minuto escuchar el pulso que nos da una señal de vida, de la determinación que persiste. El movimiento de liberación en Irán es intergeneracional y plural. Se define cada minuto que pasa a través de los gestos y las imágenes que los documentan, los fuegos y los cuerpos que danzan alrededor, sobre las ruinas de nuestro pasado.