La memoria y su conexión con el pasado se pone al servicio del olvido que no cuestione la construcción de la subjetividad. Cuatro relatos a propósito del asesinato de un samurai, invitan a reflexionar sobre la naturaleza de las acciones humanas. En la búsqueda de la verdad sobre la autoría del asesinato, cada relato encuentra su contrapunto.
Muestra Kurosawa que hay una tensión entre la capacidad constructiva de la memoria y la capacidad de acceder a los hechos del pasado que con frecuencia chocan con aspectos morales y dan cuenta de la insinceridad.